LA GUÍA DIGITAL DEL ARTE ROMÁNICO

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-LUNA-CASTILLO Y ERMITA DE HISPANIÉS-(Cont.)-



UTM 30T 672608 4677761 640 m

(CINCO VILLAS)

Ver mapa interactivo de la zona



1VISTA AÉREA DEL CERRO FORTIFICADO (SIG-PAC)2ESPESOR DEL MURO NORTE DEL CERRO

Dejamos las ruinas de la ermita atrás y nos dirigimos hacia el cerro del castillo de Hispaniés. La vía mejor es la que desde la zona de poniente de la ermita sube dando un pequeño rodeo hacia nuestra izquierda para luego buscar el punto medio del lado sur del cerro, única zona por la que es accesible con facilidad. En el camino damos con abundantes muretes, restos quizá del poblamiento alrededor de este templo. También con lo que parecen vestigios de muralla perimetral. En la imagen de cabecera tomada del Sig Pac podemos advertir que se trata de una alargada zona amesetada de eje mayor este-oeste y de unas dimensiones de 77 x 33 metros y de alrededor de 2.000 metros cuadrados de superficie.

3JÚNEZ DESDE HISPANIÉS4LADO NORTE DEL CERRO: PROBABLE POTERNA DE ESCAPE

5GOZNE DE VANO DE PUERTA EN LADO NORTE6SILLARES EN EL MURO NORTE CON MARCAS DE CANTERÍA

En la zona norte del cerro persiste buena parte del amurallamiento compuesto por sillares de notables dimensiones -en torno a los 80 cm- que conforman un espesor de alrededor de 2,40 m de anchura (Imagen 2). Hay en esta zona una pieza de arranque de puerta con el alojamiento para el eje de una de sus hojas (Imagen 5). Algo semejante he visto en el castillo islámico de Gormaz en tierras de Soria. Puerta discreta en la zona más escarpada del recinto, con la funcionalidad de permitir una salida discreta del señor del castillo en caso de necesidad.

7SILLARES EN MURO SUR8SILLARES EN MURO SUR CON MARCAS DE CANTERÍA

Los sillares están trabajados a pico, con buena hechura y conformando muro compuesto. En algunos de ellos hallamos marcas de cantería grandes, muy bien señaladas (Imágenes 6 y 9) que recojo en la zona superior del esquema en la imagen 19. Hacia la mitad del cerro, un poco al lado de poniente, se advierte el resto de muro que delimita lo que debió de ser zona más protegida del cerro. Colocando el cursor sobre la imagen 1 se advierte el esquema aproximado del mismo (Imagen 10).

9DETALLE DE MARCA DE CANTERÍA ("A") EN MURO SUR10MURO DE DIVISIÓN MEDIAL DEL CERRO

11SITUACIÓN DEL ACCESO AL ALJIBE12ACCESO AL ALJIBE Y RESPIRADERO

En el área del cerro sita a poniente es donde se halla la -de momento- última sorpresa del cerro. Allí hay un aljibe subterráneo del que si no se conoce su existencia pasa totalmente desapercibido. Su acceso es una pequeña oquedad con un respiradero por delante de la misma (Imagen 12). Varios escalones en angosto paso permiten "descolgarse" al interior del aljibe que sin duda es sorprendente, siendo su estado de conservación muy bueno.

Tiene planta alargada, en dirección oeste-este y cubre con bóveda de medio cañón perfecta que continúa de modo insensible un corto tramo recto de "muros" de apenas dos o tres hiladas de sillares (Imagen 18). Hay un segundo orificio de ventilación hacia mitad de su bóveda, en lo alto, semioculto al exterior por la vegetación. El muro de cierre al este muestra en altura, bajo la clave el hueco destinado a su llenado (Imagen 15) mostrando todavía rastro de humedad del agua que filtra desde el estrato de colmatación superior. Es probable que al limpiar el estrato que cubre esa zona al exterior aparezcan canalizaciones talladas en la roca destinadas a conducir el agua a este punto del aljibe.

En el muro de cierre situado a poniente abre el acceso que permite la bajada al aljibe. Se sitúa ligeramente descentrado hacia el sur (Imágenes 13 y 16). Los sillares son de tamaño grande, no tanto como los vistos al exterior conformando los muros perimetrales. También están trabajados a pico y bien escuadrados y ajustados. Quedan restos del enfoscado hidráulico que debió de revestir toda su superficie para evitar el escape del agua acumulada.

13INTERIOR DEL ALJIBE HACIA EL OESTE14INTERIOR DEL ALJIBE HACIA EL ESTE

15DETALE DEL MURO DE CIERRE AL ESTE CON PUNTO SUPERIOR DE ENTRADA DE AGUA16DETALLE DEL MURO DE CIERRE OESTE CON ACCESO

17SILLARES CON MARCAS DE CANTERÍA18ESQUEMA DEL ALJIBE

También en el aljibe hallamos algunas marcas de cantería; pero son diferentes a las vistas en los sillares de los muros perimetrales. Aquí son de mayor tamaño, alcanzando sus extremos la práctica totalidad del sillar. Otra característica es que son muy poco profundas e irregulares en su trazado, que no alcanza la rotundidad y perfección de las otras. En la zona inferior del esquema en la imagen 19 muestro las que he visto.

19MARCAS DE CANTERÍA EN MURALLA Y EN ALJIBE20SILLARES IBERO-ROMANOS CON MARCAS DE CANTERÍA EN EL MUSEO PROVINCIAL DE HUESCA

21ERMIA DE ESPUÉNDOLAS ANTES DE SU RESTAURACIÓN

Y hasta aquí lo meramente descriptivo. A partir de aquí comienzan las especulaciones y las hipótesis que no podrán ser despejadas sino por medio de una excavación reglada que permita situar estos elementos en relación con la historia concreta de esta zona.

Quizá lo único cierto en este momento sea la cronología de alrededor del arranque del siglo XIII de los arcos apuntados situados al interior de la iglesia de San Pedro; sin que ello quiera decir que los muros sean de ese momento. He citado el caso de la ermita de Espuéndolas, que muestro en la imagen 21: arcos apuntados de un momento tardío al interior de un templo de inicios del siglos XI. Es sugerente la idea de que el lugar pudiera ser en origen un castro y que nos remontásemos a épocas mucho más allá de lo medieval. También hay marcas de cantería en los grandes bloques de obras ibero-romanas de nuestro entorno. La imagen 20 muestra sillares que aparecieron en el solar de la Diputación Provincial de Huesca y que se conservan en el Museo Provincial de esta ciudad. Son evidentes las marcas de cantero en los mismos. Será la prospección arqueológica la que aclare ese extremo.

Lo que parece más fácil de aceptar en este momento es la ocupación (reutilización si se confirma lo anterior) de este cerro en un momento muy precoz de la reconquista, a modo de posición fortificada en la línea de "castillos" promovida por los reyes de Pamplona en su avance hacia tierras de Aragón. El templo, del que pueden ser originales parte de los muros que hoy vemos, sería iglesia castrense de este precoz conjunto religioso-militar a la que se hace referencia cuando en 1082 la dona a Siresa el rey Sancho Ramírez. Posteriormente con la zona ya reconquistada, la población se asentaría alrededor del templo que se rehace ya al modo gótico.

Otra cosa es la cronología del aljibe. Parece poco probable que fuera necesaria su fábrica en un momento tardío cuando ya Luna está en su sitio, y reconquistada la zona. Ese depósito de agua garantizaría un largo encastillamiento de la guarnición sitiada... ¿Pero por quién y en qué momento? ¿Aljibe islámico en cerro fortificado al modo del mencionado Gormaz? ¿Obra cristiana de apoyo a la precoz frontera del sur de la cristiandad?.. O quizá surjan sorpresas en un estudio prospectivo sistematizado de la zona; porque sin duda esta zona de Cinco Villas es un territorio fértil arqueológicamente hablando desde tiempos muy muy remotos..

ESTELA DE VALPALMAS

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