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LA GUÍA DIGITAL DEL ARTE ROMÁNICO Webmaster: A. García Omedes - Huesca (España) |
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| -CASTILLAZUELO. RUINAS DEL CASTILLO (Cont.)- |
 UTM 31T 257034 4661457 430 m. |
Hay que hacer un verdadero esfuerzo de imaginación para recrear en la mente cómo debió de ser el templo original. En la imagen 1, tomada desde el ángulo nordeste del templo, podemos ver en primer plano la cabecera del mismo siguiendo la línea de fachada marcada por la torre, probablemente preexistente. Entre ambas, una línea marca de modo evidente su separación. De la cabecera plana, queda el lado adosado a la torre, mientras que la mitad sur se ha derrumbado, al igual que todo el muro sur del templo. Atrás, al fondo, vemos con claridad el hastial de poniente con un ventanal grande y alargado centrándolo en altura. No hay señales de las bóvedas. El muro norte, conservado en su mayor parte, no muestra arranque de la misma por lo que probablemente cubriera con madera.
La roca en la que asienta el templo-fortaleza se halla horadada por varios túneles y aljibes. En la imagen 2 podemos ver un paso desde la fachada de ladrillo hacia la iglesia, cuyo techo está excavado en la roca y reforzado con muros de sillares que lucen marcas de cantería.
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En la parte posterior de la nave del templo hallamos una sala abovedada que en principio desconcierta por su situación y estructura. Su observación detenida nos revela que se edificó toscamente en mampostería. Su cronología es muy posterior a la edificación del templo y debió de reutilizarse, en primera instancia como dependencia de la casa palaciega y en época más moderna como corral donde guardar ganado. Hay una pileta excavada en la roca hacia la mitad del muro de cierre que pudiera haber sido bautismal o de diezmos? (Imagen 4).
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Las imágenes 5 a 7, así como la 12, muestran la zona mejor preservada de lo que fuera templo original. Corresponden al lado norte del cilindro absidal, presbiterio y muro del templo. Se advierten las señales de trabajo en sus sillares para sentar la bóveda de la sala descrita, cuyo arranque debió de llegar hasta la propia cabecera. También se advierte una semicolumna adosada a nivel de la zona de cierre actual de esa sala abovedada
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Y poco más, como los ventanales del hastial de poniente ( imagen 12), u otro en altura en el muro norte de medio punto dovelado (imagen 10). Ruina, enrona y desmoronamiento de un referente histórico que debería de recibir más atención por lo que supuso en nuestra historia.
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Una campaña de excavación fue realizada por la arqueóloga Nieves Juste en 1993
